Buenos Aires. Carina López Monja: “Hay que dar la pelea por una vida digna para los sectores populares”. (Audio)


Carina López Monja es candidata a legisladora para la Ciudad de Buenos Aires por el Frente de la Izquierda y de los Trabajadores (FIT) y participará en las elecciones del próximo 5 de julio. Ella es periodista, referente del Frente Popular Darío Santillán de Argentina (FPDS) y de Pueblo en Marcha, que es un instrumento político desde las organizaciones sociales. Revista Mariátegui la entrevistó sobre la situación de los sectores populares en la Ciudad de Buenos Aires durante el gobierno de Mauricio Macri y de las propuestas que plantean desde el espacio del FIT para solucionar las necesidades de los excluidos en la urbe.


Yásser Gómez Carbajal *
Mariátegui
03/07/15




Construcción popular


— Revista Mariátegui — ¿Qué significado tiene el lanzamiento de Pueblo en Marcha desde el trabajo de base del Frente Popular Darío Santillán?

— Carina López Monja — Para nosotros es un paso importante, un desafío, las distintas organizaciones que formamos Pueblo en Marcha, justamente somos movimientos populares que venimos de más de diez años de trabajo y construcción por abajo, de poder popular, de laburo en territorio, en los lugares de trabajo, en los barrios humildes.


El FPDS trabaja y construye desde hace más de una década con diferentes sectores populares y organizaciones sociales.

Y que después de todos estos años decidimos, también dar la pelea, la disputa en el ámbito electoral, como entendido que es una pelea más, un plano más de la disputa que tenemos que dar las organizaciones sociales y los movimientos populares pero que sobre todo tiene que estar subordinado a la construcción de poder popular y por abajo, desde las bases y a la izquierda como decimos nosotros.

En ese sentido, el Movimiento Por La Unidad Latinoamericana en el Cambio Social, El Avispero, Democracia Socialista, otras de las organizaciones que forman parte junto al FPDS, de Pueblo en Marcha empezamos a dar estos pasos hace alrededor de un año.


Herramienta política


Construimos este instrumento, esta herramienta político electoral que decimos de los movimientos sociales, desde ese lugar intervenimos y logramos, a partir de un proceso y de un camino de unidad y de discusión llegar a un acuerdo político con los tres partidos que integran el FIT, que vienen hace años ya planteando una intervención electoral, que vienen de otra tradición política de izquierda en nuestro país pero que entendemos que necesitamos esa confluencia. 


Pueblo en Marcha herramienta política de las organizaciones sociales.

Esos procesos de unidad entre identidades políticas distintas justamente es para poder avanzar y enfrentar un escenario político y económico en Argentina, de la ofensiva de los sectores económicos dominantes, conservadora, con una agenda de ajuste si se quiere, en algunos casos gradual pero en otros más profunda para el pueblo trabajador.

Y en ese sentido nos parece fundamental poder plantear una voz que proponga otra salida, una salida por izquierda, anti capitalista y por el socialismo.        


Unidad en la diferencia


— Revista Mariátegui — ¿Cuáles fueron los principales objetivos o similitudes políticas que comparten con los partidos del FIT para integrarse a esta confluencia?

— Carina López Monja — Si, a ver, nosotros decimos siempre que las fuerzas que integran el Frente de la Izquierda y de los Trabajadores en Argentina son partidos de una tradición que vienen del troskismo, que hace años han construido partidos políticos que entienden que es la forma de intervención tanto en los ámbitos electoral, sindical, estudiantil y demás, que viene con esa concepción con una forma de organización distinta a la nuestra.

Nosotros respetamos, tenemos diferencias, tenemos matices pero también tenemos muchos acuerdos en relación hacia dónde hay que caminar, igual tiene que ser el escenario político de propuestas en Argentina.

En nuestro caso, venimos de una tradición de izquierda identificada con las agendas populares de América Latina con los procesos revolucionarios de Cuba, de Venezuela, de Bolivia, con los más avanzados de nuestra América con la identificación del ALBA.


Confluencia política y electoral con el FIT.

Y con proceso por abajo que se han dado en todo el continente hace muchos años, y en ese sentido también recuperamos distintas tradiciones, nuestras organizaciones no son homogéneas en el sentido de lineales, sino que han recuperado políticas y tradiciones muy distintas pero intentando recuperar lo mejor de cada una de ellas.

Desde la tradición libertaria hasta la tradición guevarista, hasta el peronismo revolucionario en Argentina, por supuesto la identidad y la lógica marxista. 

Es decir, tradiciones políticas muy distintas pero que también permiten encontrar entre compañeros, compañeras, organizaciones en una búsqueda común por lo que entendemos y militamos todos los días, una propuesta para transformar de raíz, el país y el continente en el que vivimos.


Clase trabajadora


— Revista Mariátegui — Hay una vinculación tanto de Pueblo en Marcha como del FIT que es en el sector de los trabajadores, en el caso de ustedes con organización en los trabajadores desocupados desde hace muchos años y en el del FIT con los obreros en las fábricas, para confluir de manera conjunta en el ámbito electoral.        

 — Carina López Monja — Sí, nosotros creemos que los sectores más golpeados en los últimos años son justamente los sectores populares y la clase trabajadora y eso se ve en las luchas en las que nos encontramos en la calle con distintas organizaciones políticas, tanto las que integran el FIT como muchas otras.

En los últimos años en la Argentina ha habido desde el movimiento de desocupados a hoy, desde la crisis económica del 2001 a hoy ha crecido el empleo pero la mayoría de ese empleo ha sido precarizado, en negro, mal pago y en ese lugar nos hemos organizado.


Polo textil, cooperativa de trabajadoras del FPDS.

Y en Argentina hay una porción de la clase trabajadora que no tiene los derechos laborales básicos, que no puede acceder a un aguinaldo, a una obra social, es decir derechos laborales que fueron conquistados por la clase trabajadora y por el movimiento obrero hace muchos años y producto de lo que se llama el precariato y la economía informal hoy no tienen la posibilidad de acceder a los derechos básicos.

Por eso decimos de que nuestra lucha, nuestra forma de organizarnos y nuestra construcción está sobre todo en esos lugares con la voluntad de dar pelea para que realmente esa situación de desigualdad cada vez sea menor y que se pueda plantear una economía igualitaria que no la tenemos en este momento.


El FIT tiene organización y trabajo político en las fábricas. (Foto: PTS)

Ahí nos encontramos con las demás fuerzas políticas, además nosotros pensamos que la pelea se tiene que dar en todos los ámbitos y ahí es donde sumamos la lucha que hoy es muy fuerte en Argentina de los pueblos originarios, la pelea contra la violencia a las mujeres, por el aborto legal, por la organización de las villas, por una propuesta de la vida digna para los sectores populares.

En el entendido de que el pueblo trabajador está integrado por esa diversidad de actores que son explotados y oprimidos en planos distintos y momentos y la izquierda también tenemos que enfrentar y dar respuesta a esos planos distintos. 


Excluyente gobierno de la ciudad


— Revista Mariátegui — ¿Cuál sería tu balance de la gestión del gobierno de Mauricio Macri en la Ciudad de Buenos Aires? 

— Carina López Monja — Macri y su partido el PRO es como la nueva derecha, nosotros la identificamos con esa derecha que por ejemplo en Colombia encarna Juan Manuel Santos o Henrique Capriles en Venezuela, es una nueva derecha que utiliza un relato que muchas veces llega al sentido común, que muchas veces no habla tanto de política ni de ideología sino que trata de hablar en otro lenguaje, y que muchas veces eso produce algún efecto en la población pero de manera concreta. 

Aquí en la ciudad en los últimos ocho años no es una derecha que ha generado lo mismo que el Neoliberalismo, no es que ha privatizado todo sino que ha dado unos ocho años de gobierno a favor de las grandes empresas y de los negocios.

Es una situación, si nosotros miramos lo que era la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, que es la capital de la Argentina, es la segunda con más presupuesto de todo el país, y es en esta donde se ven registros cada vez más desiguales en términos de salud y educación.

Venimos de crisis y de profundos problemas en relación a las escuelas públicas y gratuitas. Nuestro país se ha caracterizado por tener un sistema educativo de excelencia, gratuito, público, defendido por los docentes, por los maestros u maestras, por toda la comunidad educativa.

Y en los últimos años eso se ha revertido, se ha modificado, por ejemplo hace dos años que hay peleas importantes de parte de los padres de familia para conseguir vacantes para sus hijos en las escuelas.

Los padres empiezan el año lectivo sin saber si sus hijos van a tener escuela y aula, si van a ir a clases o no. El gobierno de Macri implementó un sistema de inscripción por internet al que muchas familias no tienen acceso, y después hay un déficit de escuelas en las zonas más humildes de la capital federal, en toda la zona sur faltan más de 30 escuelas y por eso tampoco hay vacantes.


El gobierno de la ciudad ha convertido a las escuelas en instituciones excluyentes. (Foto: RL)

Entonces lo que se hace es generar una lógica perversa por la cual quienes tienen poco dinero, a quienes les cuesta mucho llegar a fin de mes, sacan el dinero que no tiene para mandar a sus hijos a una escuela privada, a una escuela paga porque saben que no van a poder tener vacante en una escuela pública y gratuita.

Ese es un escenario, el de la educación que ha afectado en los últimos años, incluso hoy a pocos días de las elecciones tenemos más de doce escuelas secundarias tomadas por los propios estudiantes con denuncias de falta de gas, de calefacción en pleno invierno, en algunos casos donde no alcanzan las aulas, en fin. Esta es una de las cuestiones de déficit que ha generado el gobierno de la ciudad.

Otra tiene que ver con la situación de vivienda que en nuestro caso, el Frente Popular Darío Santillán la hemos vivido muy de cerca desde los sectores populares. Argentina en general tiene un problema habitacional inmenso, pero particularmente en la Ciudad de Buenos Aires donde se concentra una cantidad muy importante de población, los últimos años ha sido cada vez peor, desde desalojos violentos, judicialización a quienes ocupan viviendas ociosas que están vacías hace muchos años y de manera directa desalojos con topadoras, con tres fuerzas de seguridad conjuntas, con muertos.

En los últimos cinco años hubo dos casos muy paradigmáticos: uno fue el parque Indoamericano, una zona donde había más de cien familias tomando un espacio que estaba abandonado por la necesidad concreta que tenían de vivienda y terminaron habiendo tres personas muertas.


El caso Indoamericano, un ejemplo de la falta de soluciones para la urgencia habitacional de la metrópoli. (Foto: Telam)

Y otra situación que también se dio en la zona sur de la ciudad de Buenos Aires, hace más de un año en un barrio denominado el Papa Francisco, que también después de que decenas de familias que habían construido sus viviendas ahí ante la falta de techo propio, las topadoras y las fuerzas de seguridad terminaron arrasando con todo esto.

Frente a esta situación de represión y de desalojo, la única respuesta que tiene el gobierno es proponerle a la gente un subsidio o una cantidad de dinero para que vaya a alquilar a la ciudad de Buenos Aires o se busque en otro lugar que no sea la ciudad.

A esto se le agrega un crecimiento de las personas que viven en situación de calle frente a la inclemencia de fuerzas o patotas de seguridad que han estado desalojando gente en la calle y sin mucha respuesta más que esa.

Entonces decimos; la vivienda, la salud, la educación, derechos tan básicos que están consagrados en la Constitución argentina que hoy no están garantizados para una proporción enorme de la población.     


Propuestas desde el FIT

                
— Revista Mariátegui — ¿Cuáles son las propuestas del FIT y como candidata a legisladora de la Ciudad de Buenos Aires?

— Carina López Monja — Por ejemplo, en el caso de las escuelas y de la educación se ha presentado un proyecto de ley que tiene que ver con la construcción de 32 escuelas nuevas en la zona sur de la Ciudad de Buenos Aires. Hay un relevamiento que se ha hecho desde los gremios de maestros y maestras para decir donde tendrían que estar esas escuelas, cuáles son la cantidad de personas que no tienen vacantes y que podrían ser beneficiadas con esa situación.

Y es un escenario que vivimos todos los días, siempre contamos desde Pueblo en Marcha, desde el Frente Popular Darío Santillán, justamente frente a esta imposibilidad de tener escuelas en la zona sur.

Nosotros construimos nuestra propia escuela, un bachillerato de educación popular que fue reconocido por el Estado y que hoy asiste y permite terminar la escuela secundaria a más de 40 jóvenes y adultos cada año que se van inscribiendo.


Bachillerato del FPDS, una alternativa de autogestión educativa reconocida por el Estado.

Todos los años desde que abrimos el bachillerato tenemos a más de 50 personas en la lista de espera, es decir, a pesar de crear una escuela nueva en la zona, crearla desde las organizaciones sociales, desde los movimientos populares sigue habiendo necesidad de nuevas escuelas para garantizar las vacantes de todos los jóvenes, los niños y niñas. Ese es uno de las propuestas desde el Frente de Izquierda.

Otra tiene que ver por supuesto con el tema de la vivienda, con la necesidad de pensar la emergencia habitacional, plantear una ley que impida, congele los desalojos violentos hasta que se resuelva y haya un plan de vivienda integral en la Ciudad de Buenos Aires.

Y por otro lado, fomentar planes que se han hecho en su momento y que es necesario poder retomar, profundizar y mejorar, que tiene que ver con la posibilidad de cooperativas de vivienda que construyan sus propias viviendas. Además son planes que han funcionado en otros puntos del país, incluso en la Ciudad de Buenos Aires antes que llegara el gobierno de Mauricio Macri, y que permitiría realizar viviendas sociales y reducir ese déficit habitacional que tenemos hoy.  

Esas son algunas de las propuestas centrales que venimos haciendo e impulsando, junto a otras como por ejemplo de reducir a seis horas con un salario igual a la canasta básica para el caso de las enfermeras, uno de los sectores que está más precarizado actualmente en la ciudad, que tiene que ver con los hospitales públicos y gratuitos, que es el sector de enfermería donde las enfermeras también se van a trabajar a los hospitales privados por el mal pago y la explotación que sufren en los hospitales públicos de la ciudad.              


Voto hacia la izquierda


—  Revista Mariátegui —  El FIT en las elecciones del 2014 obtuvo más de un millón de votos a nivel nacional, asimismo en Argentina además del Frente de la Izquierda y de los Trabajadores, hay otros espacios desde la izquierda y desde los sectores populares que participarán en las próximas elecciones ¿Qué significado tiene esto?

— Carina López Monja — Para nosotros el crecimiento del voto hacia la izquierda a nivel parlamentario, electoral, lo que muestra es que existe otra voz y otra propuesta, una alternativa concreta que se presenta frente a las opciones del sistema que de alguna manera vienen planteando cosas similares, si bien no son todas las propuestas lo mismo, no son todos los partidos lo mismo, sí tienen que ver con propuestas sistémicas que en el caso de Argentina y después de doce años de kirchnerismo tiene que ver hoy si se habla de un ajuste gradual hacia adelante, hacia los sectores populares o si va a ser un ajuste de raíz, mucho más fuerte y de manera brutal.

En ese sentido, si bien sigue gobernando la derecha tanto aquí en la Ciudad de Buenos Aires como se ha fortalecido en algunas provincias opciones conservadoras, nos parece que el crecimiento de este voto a la izquierda es eso, es la posibilidad de pensar una alternativa una propuesta que no tiene que ver con esas opciones conservadoras, que propone distinto y que además es una propuesta de ruptura con las opciones tradicionales.

Por eso, para nosotros es fundamental consolidar, si bien es mucho más difícil y no se ha logrado hasta el momento en el ámbito ejecutivo pero tampoco de forma distrital, es fundamental el término de poder sumar más legisladores, más legisladoras, más parlamentarios para de manera concreta discutir qué leyes, qué proyectos de ley se pueden impulsar en beneficio del pueblo trabajador y de los sectores populares, y no terminen siendo para los negocios.

Es algo que venimos planteando con mucha fuerza porque tiene que ver con la experiencia de todos estos últimos años cuando vos decías, bueno el poder que en general está en la derecha, desde las organizaciones populares estamos acostumbradas a eso, a que el poder tenga que ver con, cómo avanzar sobre los sectores populares, cómo plantear una ofensiva sobre el pueblo organizado.

Y en ese sentido la posibilidad de pensar proyectos de ley, de poder impulsarlos y hasta conseguirlos, tiene que ver con poder ir transformando aunque sea en pequeñas cosas esa sociedad por la que nos organizamos todos los días y de luchar por otro sistema.

* Periodista. Editor de Revista Mariátegui.

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