Perú: Alerta que camina...la sangre indígena por la ciudad de Lima


























































El pueblo indignado se apoderó de céntricas calles durante toda la tarde

Texto y Fotos: Yásser Gómez / Mariátegui
12/06/09


La movilización convocada en Lima, por los más grandes gremios sindicales, campesinos, agrarios e indígenas del Perú, que estuvieron representados por Miguel Palacín CAOI (Coordinadora Andina de Organizaciones Indígenas), Mario Huamán CGTP (Confederación General de Trabajadores del Perú), Mario Palacios CONACAMI (Confederación Nacional de Comunidades Afectadas por la Minería), César Bazán CUT (Central Única de Trabajadores), Antolín Huáscar CNA (Confederación Nacional Agraria), -de Ollanta Humala ni rastros- tenía programado culminar en la Plaza de Armas frente a Palacio de Gobierno. Para gritarle a Alan García su responsabilidad político-militar en el genocidio de Bagua que ha enlutado a nuestra patria y para exigir la derogatoria de los decretos legislativos que afectan a nuestros pueblos originarios y a sus territorios.

Sin embargo, cuando la multitudinaria marcha que aglutinó a unas 15 mil personas -algo poco usual en esta urbe- se dirigía a Palacio de Gobierno por la Avenida Abancay en el Cercado de Lima. A los líderes gremiales, se les acercó un Fiscal para decirles que las movilizaciones no estaban permitidas en la Plaza de Armas. Por lo cual las dirigencias decidieron retirarse, yendo en contra de lo que pedía esa gran masa indignada, -no veíamos tanta rabia en la gente desde las protestas que tumbaron a Fujimori- que era avanzar hacia la residencia de Alan García.

Pero como los pueblos somos los que construimos la historia. La multitud decidió seguir la ruta y avanzar hacia el Congreso de la República. A una cuadra de este, nos chocamos con la represión policial, caballería, carros rompe manifestaciones, gases lacrimógeno-pimienta, así como perdigones. Uno de estos hirió al activista de izquierda y abogado Hildebrando Castro-Pozo Chávez.

Aunque la multitud retrocedió una cuadra y quedó a cuatro de Palacio de Gobierno, logró paralizar toda la avenida Abancay, en las bocacalles continuaba la rabia y los forcejeos con la policía se repitieron hasta las seis de la tarde. Los negocios tuvieron que cerrar, las líneas de transporte cambiar su ruta y las paredes quedaron impregnadas de frases emblemáticas como: ¡Alan Genocida! ¡Ni las balas nos pararán! ¡Insurgencia! ¡Los pueblos estamos de Pie! ¡La Selva no se vende! ¡Pizango Dignidad! ¡Prensa amarilla no dice la verdad!

Hay una frase que no se llegó a escribir, pero que simboliza a esa multitud que salió a las calles indignada por el genocidio en Bagua y por el descontento con el modelo neoliberal implantado en Perú hace casi veinte años: ¡Alerta que camina...la sangre indígena por la ciudad de Lima!

La movilización del jueves 11 de junio en Lima, puede ser un buen comienzo para el despertar del movimiento popular en esta urbe, que continúa tan colonial como hace cinco siglos.

Comentarios

yasser estas en venezuela? necesito hablar contigo....

es Dubraska!!!
Unknown dijo…
Muy bien Yasser. Hay que señalat la gran presencia de estudiantes universitarios. La juventud es el presente de hoy o no es nada... ¡La selva es peruana, gobierno vende patria!
Unknown dijo…
bien Perú aún en la lucha resistiendo!!!
hay algo para firmar?????
Así es camarada María, por la premura de publicarlo rápido, en la pequeña crónica de la movilización se me paso mencionar la presencia mayoritaria de jóvenes y entre ellos de gran cantidad de estudiantes universitarios -que fue de lo más diverso-. Junto a sacar a las calles de Lima a tanta gente, fueron lo aspectos más positivos de la jornada. Abrazos. Yásser