El pueblo colombiano merece una salida dialogada al conflicto. / Gloria Florez parlamentaria andina por el Polo Democrático Alternativo


Mariátegui
09/05/10


Gloria Florez es una reconocida defensora de los derechos humanos, militante del Polo Democrático Alternativo (PDA) y Parlamentaria Andina de reciente elección. Mariátegui. La revista de las ideas la entrevistó en Lima luego de su participación en el Congreso fundacional del Movimiento Tierra y Libertad.

- Usted fue una de las impulsoras del diálogo del Polo Democrático con el gobierno de Venezuela para que se revierta el corte de relaciones comerciales que provocó la instalación de bases militares norteamericanas en Colombia ¿En qué consistió esta?

- Nosotros como PDA a raíz del acuerdo firmado entre el gobierno colombiano y el de los EE.UU. que permite el ingreso y la movilidad de tropas norteamericanas en nuestro territorio, el uso de bases militares, el uso de aeropuertos y de otros lugares del país a raíz de lo que ocasionó ese acuerdo en América del Sur, de la respuesta de varios gobiernos. Desarrollamos una estrategia tendiente a establecer un diálogo con los gobiernos de los países vecinos, para conversar sobre las preocupaciones expresadas por los gobiernos sobre el acuerdo militar, para expresar también la preocupación y la posición del Polo Democrático. Ante todo buscamos en esa estrategia posiblitar un diálogo entre nuestros pueblos, entre nuestras naciones, para evitar que esa intervención tan directa y flagrante de los EE.UU. ocasionara un rompimiento de relaciones.

Quiero decir que no sólo fuimos a conversar con Hugo Chávez en Venezuela, también lo hicimos con el presidente Rafael Correa de Ecuador, además hemos realizado reuniones con otros gobiernos de Sudamérica como Brasil, Uruguay, Argentina, Bolivia, para expresar la necesaria unidad y armonía entre nuestros pueblos y la posición clara del Polo Democrático de no aceptar un acuerdo que afecta nuestra soberanía nacional y la estabilidad democrática de la región.

Esa misma posición la expresamos ante el gobierno de los EE.UU. y ante el pueblo norteamericano, porque consideramos que Colombia no puede constituirse en un territorio donde se despliegue tanta fuerza militar y que a su vez genere respuestas que para nosotros no deberían ser como la de buscar más armas en los países vecinos, porque consideramos que en vez de armas los recursos de los estados deben dirigirse a responder a las necesidades políticas y sociales de nuestros pueblos, pero tristemente Colombia se ha prestado para ese acuerdo militar y por eso, nosotros estamos luchando para cambiar las condiciones y crear unas relaciones con los EE.UU. basadas en el respeto y en ofrecerle a nuestros pueblos, no militarización, sino oportunidades para el desarollo.

- Por participar en este proyecto, una campaña mediática la acusó de ser promotora del gobierno venezolano en Colombia...

- Ese fue un montaje (http://www.elespectador.com/articulo191500-candidata-del-polo) que sea realizó días antes de las elecciones que pretendía afectar la votación por Gloria Flores, afortunadamente ante ese artículo sentencioso que carece de verdad, porque nunca he hecho un trabajo de derechos humanos para atacar a mi gobierno y posicionar la agenda de Hugo Chávez como se pretendió mostrar en el artículo. Ante ese artículo tan tendencioso la respuesta de la ciudadanía fue la contraria, fue votar por mi. Incluso los comentarios que se hicieron sobre el artículo en internet fueron muy contudentes diciendo que ese tipos de montajes no lo esperaban de un periódico como El Espectador, que se estaba afectabando la credibilidad de una defensora de derechos humanos que lleva más de treinta años en ese ejercicio.

La pretensión de ellos era debilitar mi campaña y logró lo contrario, la gente votó masivamente por mí y por eso llego con mucha fuerza y mucho respaldo social de los ciudadanos de Colombia al Parlamento Andino, para trabajar por la integración, la paz de nuestra región. Porque como defensora de derechos humanos y como miembro de un partido (PDA) que trabaja por la paz vamos a poner todo nuestro esfuerzo para evitar la guerra, la confrontación entre nuestros pueblos y por garantizar la integración plena con todos los países de América Latina.

- Usted integra la Coalición contra las Bases Norteamericanas ¿Cómo va esto?

- Es una gran coalición que acaba de constituirse en Colombia que integran distintos sectores sociales: la gran coalición democrática, las centrales obreras, los partidos políticos, sectores democráticos, la organizaciones de derechos humanos, las feministas, los pueblos indígenas, las mujeres que trabajan por la paz, los académicos que han hecho una crítica con mucha sabiduría con mucha contundencia sobre las implicaciones de ese acuerdo para Colombia y para la región.

Aspiramos que este Comité No Bases pueda no sólo desarrollar actividades en Colombia sino puedan integrarse acciones continentales que permitan la desmilitarización de América Latina y del Caribe. La respuesta no deben ser militar sino social, insisitimos en que los recursos de los estados deben disponerse en función de responder a los grandes desafíos de nuestros pueblos, pero lo que nos quieren imponer son políticas hemisféricas de seguridad que nos afectan profundamente y que afectan a los movimientos sociales que luchan por sus reivindicaciones y por sus territorios afectados por tantos intereses multinacionales.

- Hace unos días Juan Manuel Santos dijo que si él llegaría a la presidencia y fuese necesario volvería a bombardear territorio ecuatoriano, lo que Rafael Correa y Hugo Chávez criticaron ¿Si Santos llega al poder sería más conservador que Uribe?

- Primero, espero que haya un cambio en Colombia estamos el 30 de mayo en elecciones presidenciales, aspiramos a que el candidato del Polo Democrático Alternativo, Gustavo Petro pase a la segunda vuelta, seguramente se va a disputar entre el representante del uribismo Juan Manuel Santos con la izquierda colombiana o con otro de los partidos que están con buen puntaje como el candidato Antanas Mockus, que representa a sectores de centro. Nosotros siempre hemos estado por una gran coalición democrática que permita superar estos largos años de régimen autoritario, que no sólo ha convertido a Colombia el país más desigual de la región sino que ha permitido acuerdos como el que se suscribió con los EE.UU. que afectan nuestra soberanía y la estabilidad democrática del país.

Ante todo, nosotros trabajamos por la aplicación plena por el derecho internacional, por la plena soberanía y la libre determinación de nuestros pueblos y de nuestras naciones. En ese sentido el Polo Democrático condenó lo que ocurrió en territorio ecuatoriano, porque siempre debe prevalecer el derecho internacional, el intercambio y el diálogo entre nuestros gobiernos para evitar que se afecten nuestras relaciones y la soberanía de otros países. No estamos a favor de salidas militares y menos en territorio extranjero donde se afecta esa soberanía y el derecho internacional, siempre hemos buscado el diálogo como camino para resolver nuestros problemas y nuestros largos años de violencia, pensamos que el pueblo colombiano merece una salida dialogada al conflicto.

Hemos sido muy enfáticos y exigentes con las FARC para que libere a los secuestrados y pueda sentarse con toda la seriedad en un diálogo que permita la superación de la violencia como método de acción política. El Polo Democrático es un partido profundamente democrático convencido de las luchas civiles en el marco de la legalidad y siempre propenderá porque Colombia supere esa larga noche de violencia que lleva más de sesenta años y que ha dejado tanta crisis. Por eso también trabajamos para que nuestro conflicto no se regionalice, porque existen pretensiones para que nuestro conflicto se expanda involucrando a otros países en un guerra que es de Colombia, que es nuestra y que debe superarse cuanto antes por la vía política y negociada.

- El 20 de julio usted asumirá el cargo de parlamentaria andina ¿Qué perspectiva tiene del Parlamento Andino y de la correlación de fuerzas que existe en el interior?

- El Parlamento Andino tiene que ponerse a funcionar plenamente como lo que es, el órgano que representa la voz de los pueblos de las naciones andinas. Somos sólo cinco parlamentarios por país, es un parlamento de veinte, pequeño, pero que debe y necesita activar mecanismos de participación ciudadana de la sociedad civil, de los movimientos sociales, para que puedan deliberar sobre los temas estratégicos de la integración, que son múltiples. El Parlamento Andino puede ser un instrumento para el diálogo, para el encuentro de nuestros pueblos de nuestras culturas para fortalecer las redes de los pueblos indígenas originarios, las redes de las mujeres, de los trabajadores, de los empresarios en la búsqueda de una autonomía seria de nuestras naciones en relación con el gran capital para fortalecer la capacidad competitiva de la región en relación con grandes bloques de poder.

Es decir, el Parlamento Andino tiene que constituirse en un espacio deliberante donde se eleve la vocería de los movimientos sociales, de sectores estratégicos de la sociedad civil y que aborde temas que nos afectan mutuamente y que si lo sabemos tratar de manera dialogada puede permitirse que se avance muchas cosas en la región y que se pueda incidir de manera directa en la Comunidad Andina de Naciones (CAN) pese a las diferencias que tenemos.

Tenemos enormes diferencias, pero también tenemos muchos aspectos que nos unen y que nos integran, eso tiene que prevalecer y para eso tiene que servir el Parlamento Andino.

- Ahora que se inicia -en la mayoría de países de América Latina- la celebración del Bicentenario de la Independencia, es importante la labor del Parlamento Andino en esta lucha por la independencia definitiva que aún continúa...

- El Parlamento Andino también tiene que involucrarse con los sectores de la sociedad civil de los movimientos sociales del movimiento cultural para poder trabajar sobre el Bicentenario. Esta es una gran oportunidad para la reflexión y para unir agendas que nos permitan avanzar hacia una verdadera intención regional y hacia una verdadera independencia de nuestros pueblos.

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