Perú: A 32 años de la matanza de Cromotex


La clase obrera consciente y el pueblo combatiente

Mariátegui
11/02/11


Los obreros de Cromotex un 04 de febrero de 1979 protagonizaron una de las páginas más gloriosas de la historia de luchas de nuestro pueblo.

Hace 32 años los obreros de Cromotex protagonizaron una memorable hazaña al enfrentarse a la tiranía de la patronal, tomando su centro de trabajo y resistiendo, aún a costa de sus vidas, el brutal desalojo que impuso la policía. El propietario de Industrial Cromotex S.A., Antonio Mussiris Chaín , de origen árabe y chileno de nacimiento, cebaba sus arcas con el sudor y las lágrimas de los trabajadores, tratando de descabezar el sindicato en alianza con la dictadura militar del general Francisco Morales Bermúdez.

En 1979, la dictadura se batía en retirada bajo presión de dos históricas huelgas nacionales indefinidas del SUTEP (1978-1979) y la huelga general minera de ese mismo año. Buscó como válvula de escape la convocatoria a una asamblea constituyente que facilitara el paso del poder a la civilidad. La alianza del general Morales Bermúdez con los sectores empresariales más reaccionarios se suscribió en medio de la desesperación de un régimen que no podía sostenerse un día más sin recurrir a la represión.

Cabe destacar que la intención de la patronal, en alianza con el dictador, era desmovilizar al movimiento obrero después del histórico Paro Nacional del 19 de Julio de 1977 y de las oleadas de lucha que continuaban arrinconando al gobierno militar. Tales intenciones tropezaban con la organización y disciplina de la clase trabajadora, la misma que había alcanzado niveles superiores de lucha y confrontación.

Un 28 de diciembre de 1978 en audaz operativo planificado, los trabajadores tomaron la empresa textil Cromotex. Esta toma de fábrica se convirtió, conforme pasaban días y semanas, en emblemática para toda la clase obrera de Lima y el Perú. Frente al peligro inminente de que la empresa, según la legislación vigente en ese momento, pasara a ser administrada por los trabajadores, Mussiris y su representante legal, el abogado Luis Bedoya Reyes (líder fundador del derechista PPC) exigieron que la dictadura militar ordenase el desalojo de la fábrica.

El 4 de febrero a las 5.00 am. fuerzas policiales con matones contratados por la empresa, inician el asalto para concluir con el desalojo. Se produce la muerte de dos trabajadores y otros son heridos. Los primeros en caer abatidos fueron Marcelino Castro y Silvio Jimenez. El capitán -Guardia Civil- que lideraba el operativo, César Villón de los Santos, muere al ser rechazado por los trabajadores cuando intentaba escalar la pared. El trabajador Inocencio Paco Quispe murió también. Los trabajadores resistieron hasta que sus defensas fueron sobrepasadas.

Uno de los obreros con heridas más serias fue el dirigente proletario Hemigidio Huerta. Llevado en el ómnibus policial le dijo a Nestor Cerpa Cartolini: "Toma mi sangre y escribe para que el pueblo sepa que nos están llevando presos". Por la gravedad de sus heridas, Hemigidio muere el 12 de febrero. Los trabajadores Máximo Montoya y Máximo Lara murieron también por las heridas recibidas ese día. El balance de los hechos arrojó un saldo final de seis obreros y un policía muertos.

Los trabajadores de Cromotex, encarcelados u hospitalizados, continuaron la lucha con huelgas de hambre y defensa judicial de sus intereses, sin desmayar un instante hasta conseguir la excarcelación de sus compañeros. Los familiares también se organizaron mediante ollas comunes para resistir la presión económica de la desocupación.

Diecisiete años después, cuando el guerrillero Néstor Cerpa Cartolini dirigió a 13 combatientes del MRTA que tomaron la casa del embajador japonés Morihisa Aoki, en diciembre de 1996, eligió como seudónimo el nombre de Hemigidio Huerta. Frente a la explotación de la clase trabajadora bajo condiciones aún más duras que las que imponía la dictadura militar, la acción armada de Cerpa Cartolini constituía un acto de insurgencia contra un gobierno usurpador, totalitario e igualmente dictatorial: el de Fujimori y Montesinos. Era la continuación de la lucha iniciada en Cromotex, por la vía armada hacia la toma del poder para construir la patria grande de los trabajadores.


¡VIVAN LOS MÁRTIRES DE CROMOTEX EN LA MEMORIA DEL PUEBLO PERUANO, POR SIEMPRE...!


http://www.despertarnacional.com

Comentarios

MilagrosVRR dijo…
Tuve la suerte de trabajar políticamente con los compañeros de Cromotex, especialmente con el compañero Hemigidio Huertas que sigue siendo ejemplo de consecuencia revolucionaria y cuyo mensaje estará siempre vivo:
HASTA LA VICTORIA FINAL!
PATRIA O MUERTE!
Unknown dijo…
Yo tambien recuerdo ese acto valeroso hoy 25 de dic 2019 en mi facebook mozuelos del poc se lanzan de candidatos sin saber que sus lidetes tienen las manos con sangre
Unknown dijo…
Buenos dias por favor podrian decirme donde se puede conseguir el libro " Toma mi sangre" sobre la masacre de textil cromotex s.a. edwardwilliams13@gmail.com



Unknown dijo…
Esto es apología al terrorismo, la izquierda recalcitrante y su "falsa superiodad moral" que busca acabar con todas las libertades.
Ustedes son TERRORISTAS, no hay otra palabra.
Su ideología nació muerta y nunca podrá ser implantada, tan muerta con el genocida Abimael Guzmán.
¡Viva la libertad carajo!
technologies dijo…
I am working as a SEO Analyst.My blog gives information about latest technologies and IT Courses.elitetorrents