Perú: Trabajadores mineros: El pueblo de La Oroya está en colapso social y económico


Mariátegui
29/03/11

Roiberto Gúzman Estrada es secretario general del Sindicato de Trabajadores Metalúrgicos de La Oroya, uno de los tres sindicatos organizados en la empresa Doe Run Perú. Mariátegui. La revista de las ideas conversó con él sobre la incierta situación de los trabajadores del socavón ante la paralización de la mina y el poco interés del gobierno y la empresa para resolver esta situación.


- Alrededor de 2 mil mineros han venido a Lima ¿Cuál es el reclamo que tienen ustedes?

- En lo que va del año es la segunda vez que venimos a Lima, estamos haciendo nuestra marcha pacífica ahora conjuntamente con la CGTP, somos más de 3 mil 500 trabajadores junto a nuestras familias que vivimos este colapso social que se ha producido por la insensibilidad e incapacidad del gobierno. Además de la falta de voluntad del mismo gobierno y de la empresa Doe Run para que se active de una vez por todas nuestra fuente de trabajo que es la fundición de La Oroya.

- ¿Qué consecuencias ha traído esta falta de resolución del problema?

- El pueblo de La Oroya está en un colapso social y económico, no hay movimiento económico y automáticamente la población vive un tormento que no puede ser justo y el gobierno no hace nada por reactivar y sobre todo por la inversión que debe ser el movimiento económico de la región Junín. Por eso los trabajadores y la población en su totalidad hemos venido a Lima para exigir -junto a la CGTP- en las calles, que el gobierno que está de salida por lo menos intente resolver este problema.

- ¿Cuáles son los principales problemas de La Oroya?

- El hambre, la miseria y la delincuencia se cierne toda vez que no hay trabajo, no hay un movimiento económico, Este colapso social ha hecho de que la población estemos en las calles, no solamente en Huancayo sino también en Lima y La Oroya.

De no resolver este problema se avisora un paro regional y esto va a afectar totalmente a nuestro país. Por eso hacemos un llamado al presidente Alan García que ordene a sus representantes sentarse en la mesa con la mediación de la Defensora del Pueblo, Beatriz Merino que ha convocado a las partes.

- ¿Se presentó alguna propuesta de parte del Estado o de la empresa Doe Run para que haya una reconversión laboral o que sean trasladados a otra mina?

- Antes de llegar a este proceso concursal donde nos enviaron los representantes de CONCORMIP, estamos en la última etapa que es la Junta de Acreedores. Espero que en esta la empresa de a conocer su plan de trabajo y de negocios por la reactivación inmediata de la Fundición de La Oroya.

A pesar de que en su oportunidad la empresa ha tenido negociaciones con los acreedores, de los pagos que podían hacerse en forma sistemática pero no ha habido ningún efecto. Sin embargo, ahora la Junta de Acreedores debería definir el destino de La Oroya: sería la reactivación y reestructuración inmediata o de lo contrario la liquidación, de llegar a esta última estarían sometiendo a un crimen social a La Oroya, que dejaría a los trabajadores y a sus familias en las calles.

- ¿Están recibiendo algún pago parcial?

- Sí, por el momento tenemos el vínculo laboral con la empresa, estamos recibiendo el 70% de nuestros haberes y asistiendo todos los días a nuestros centros de trabajo para hacer acto de presencia. No hay nada de actividad operativa que se pueda hacer pero tenemos la esperanza de que se pronuncien los acreedores en este proceso concursal.

Comentarios

Anónimo dijo…
Lo que pedimos los trabajadores es que se reanude el diálogo con el gobierno y la empresa para tratar de encontrar puntos de coincidencia y de esta manera arribar a la solución que esperamos cual es la de reactivar el complejo metalúrgico de La Oroya paralizado ya dos años. Se requiere precisar la ley 29410 con respecto al tema de de los 20 meses para concluir el último proyecto PAMA y este plazo debe correr a partir del reinicio de operaciones.