Recortes y desempleo pueden causar más disturbios en Gran Bretaña


Foto: Reuters. Un grupo de personas saqueando una tienda en Hackney, al este de Londres

Mariátegui *
08/08/11


Londres - A principios de este año, el legislador de Tottenham David Lammy pidió más atención para a su atribulado distrito después de que cifras oficiales mostraron que tenía los niveles más altos de desempleo en Londres y el décimo más alto en toda Gran Bretaña.

El último fin de semana, lo consiguió -aunque no de la forma que había esperado- después de que una protesta contra el asesinato de un hombre negro de 29 años a manos de la policía, provocó algunos de los disturbios más violentos en la capital en años.

Los políticos, incluyendo a Lammy, se han apresurado a responsabilizar por los disturbios y saqueos en la noche del sábado y brotes similares de violencia el domingo en otras partes de Londres, a pequeños grupos de delincuentes.

Pero residentes locales y analistas advierten que los altos niveles de desempleo juvenil de larga duración y los recortes de servicios como centros juveniles en lugares como Haringey -el municipio donde se encuentra Tottenham- están creando un polvorín de descontento.

Lammy había esperado que el distrito pudiera volverse una zona de empresas que atrajeran la inversión.

"Haringey es uno de los lugares más pobres del Reino Unido, en el corazón de la bulliciosa Londres", dijo el profesor Mike Hardy, director ejecutivo del Instituto de Cohesión Comunitaria, que investiga y desarrolla políticas para integrar comunidades.

"Esto no es sobre la raza, fe y clase pura y simple (...) Uno de los motores más potentes se trata de los que tienen y los que no tienen (...) Es sobre aquellos que están excluidos", agregó.

Cerca de 6.000 personas en Tottenham, o el 8 por ciento de la población adulta, están reclamando asignaciones laborales a quienes ofrecen trabajo, más del doble del promedio del Reino Unido. Un quinto de quienes reclaman tienen menos de 24 años.

Hardy dijo que el alto desempleo, junto con recortes de los "instrumentos de cohesión" como deportes y grupos comunitarios, crearon ambientes donde la gente se siente como extraño en su propia sociedad.

"La gente aprende a vivir fuera de las normas (...) donde no tienen elementos para las estructuras que esperamos", agregó

Muchas de las comunidades más desfavorecidas de Gran Bretaña han trabajado duramente para construir redes de apoyo dentro de las comunidades y con estructuras formales como la policía, tras los disturbios de la década de 1980, incluyendo una en Tottenham en 1985.

En ese momento, un funcionario policial murió durante los disturbios provocados por la muerte de una mujer cuya casa estaba siendo allanada por la policía.

De la misma manera, las protestas del sábado, que Lammy dijo que fueron luego "secuestradas" por delincuentes que incendiaron edificios, saquearon tiendas y atacaron a funcionarios de la policía, se desataron por la muerte de un hombre negro de 29 años a manos de la policía la semana pasada.

, ago 8 2011. A principios de este año, el legislador de Tottenham David Lammy pidió más atención para a su atribulado distrito después de que cifras oficiales mostraron que tenía los niveles más altos de desempleo en Londres y el décimo más alto en toda Gran Bretaña.

Nuevos disturbios estallan en capital inglesa

Londres.- La violencia se extendió a nuevas áreas de Londres y estallaron saqueos en la ciudad de Birmingham el lunes, en la tercera noche de los peores disturbios que ha visto Gran Bretaña en décadas.

El primer ministro David Cameron interrumpió sus vacaciones y regresaba a Londres para manejar la crisis.

En Hackney, un área de diversidad racial en el este de Londres, cerca de la sede de los Juegos Olímpicos del 2012, jóvenes encapuchados incendiaron cubos de basura y los empujaron calle abajo hacia la policía, mientras lanzaban botellas y ladrillos.

Muchos reían al escapar de la policía que arremetió contra ellos. Otros gritaban en sus teléfonos móviles a sus amigos para que se unieran a los disturbios.

La violencia comenzó el sábado por la noche en el norteño distrito de Tottenham, cuando una protesta pacífica por la muerte de un sospechoso a manos de la policía se tornó violenta.

El lunes, la violencia se había extendido al sur de la ciudad, incluidas las áreas de Peckham, Croydon y Lewisham.

Los atacantes también rompieron vidrieras y saquearon propiedades en Birmingham, en el centro de Inglaterra, dijo la policía, en la primera señal de que la violencia se estaba extendiendo más allá de la capital.

En Hackney, con la calle llena de humo, saqueadores destrozaron un local y robaron whisky y cerveza. Uno de ellos hasta tomó un paquete de cereales. Otro hombre se alejó corriendo entre risas, llevándose cuatro botellas de whisky.

"Soy de Sudáfrica y esto me recuerda a los disturbios que teníamos allá, excepto que la policía de aquí no es tan dura", dijo un residente de mediana edad, quien declinó dar su nombre.

"Pero los jóvenes no tienen respeto ni por la policía ni por la propiedad. Es triste para la gente que vive aquí", añadió.

En Peckham, las llamas salían de un edificio incendiado y los escombros estaban esparcidos en la calle. La gente entraba y salía de las tiendas saqueando.

La policía arrestó a 215 personas, según la Secretaria del Interior Theresa May, quien también interrumpió sus vacaciones debido a los disturbios.

"La violencia que hemos visto, los saqueos que hemos visto, la matonería que hemos visto, esto es delincuencia clara (...) Estas personas serán llevadas ante la justicia, enfrentarán las consecuencias de sus acciones", afirmó May.

"Sin sentido"

Pero pese a la fuerte presencia policial, los agentes parecían incapaces de controlar la violencia pues los saqueadores se coordinaban por teléfonos móviles y el sitio de mensajería corta Twitter para adelantarse a las fuerzas de seguridad.

En Hackney, jóvenes usando capuchas marrones se tomaron fotografías frente a un automóvil ardiendo.

"No se por qué están haciendo esto", dijo una mujer de mediana edad que vive en las cercanías. "No tiene sentido, en su propio barrio", añadió.

La cadena BBC dijo que los disturbios estallaron luego de que la policía detuvo y registró a un hombre.

Funcionarios británicos describieron como delincuentes oportunistas a los alborotadores y dijeron que la violencia no afectaría los preparativos para los Juegos Olímpicos.

El comisionado adjunto de la policía Steve Kavanagh dijo que la fuerza pondría más oficiales en las calles en Hackney y otras áreas en la noche del lunes.

Un pequeño grupo de personas se atrincheró en el teatro Hackney Empire, de 110 años, donde actuaron figuras como Charlie Chaplin y Stan Laurel, para escapar de la violencia.

"Estamos encerrados adentro", dijo una mujer, que no dio su nombre, en una conversación telefónica con Reuters.

"No queremos estar cerca de las ventanas. Parecen estar atacando las tiendas en este momento. Da mucho miedo. Pusimos cadenas en las puertas", agregó.

Los disturbios se produjeron en medio de sombrías perspectivas en Reino Unido, donde la economía tiene dificultades para crecer, mientras el Gobierno impone recortes de gasto y alzas de impuestos para ayudar a eliminar un déficit presupuestario que asciende a más del 10 por ciento del PIB.

Mientras los políticos británicos se apresuraron a culpar de la violencia a delincuentes, residentes dijeron que la indignación, el alto índice de desempleo y los recortes en servicios públicos, asociados al resentimiento de la policía, jugaron un papel muy importante.

"Tottenham es una zona marginal. El desempleo es muy, muy alto, están frustrados", dijo Uzodinma Wigwe, de 49 años, que hace poco fue despedido del trabajo como limpiador.

Pero funcionarios del Gobierno dijeron que no hay excusas.

"Fue innecesario, oportunista y violento, nada más y nada menos. Es totalmente inaceptable", dijo el vice primer ministro Nick Clegg.

* Con información de Reuters

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