Venezuela: Christian Valles: La lectura eleva el nivel de conciencia y la capacidad crítica del pueblo


Yásser Gómez / Mariátegui
04/09/11


Christian Valles. Antropóloga e historiadora de la UCV (Universidad Central de Venezuela), presidenta del Instituto Autónomo Centro Nacional del Libro fue una de las principales expositoras de la 16 Feria Internacional del Libro de Lima que tuvo como país invitado a Venezuela. Mariátegui. La revista de las ideas conversó con ella sobre los cambios que en la práctica la Revolución Bolivariana ha hecho sobre una la Ley del Libro neoliberal para dejar a un lado la visión mercantil de esta y acompañar el proceso de editar y producir millones de libros que están al alcance de las mayorías excluidas junto con ferias de libros, imprentas y planes de lectura que se desarrollan y propagan por todo los pueblos del territorio llanero. Es decir, la cultura como derecho fundamental equiparable a la vida.

- ¿Qué significado tiene la Ley del Libro promulgada en el último gobierno puntofijista y como cambia el objetivo de esta durante la Revolución Bolivariana?

- Esta ley nació el año 1998 en un gobierno puntofijista, supongo que tenía una idea con este gobierno de Carlos Andrés Pérez a cuando gana el presidente Hugo Chávez. Si tu lees la Ley del Libro que crea en Venezuela el Instituto Autónomo Centro Nacional del Libro, yo siempre digo que si la gente del Fondo Monetario Internacional y del Banco Mundial leen esa ley se ruborizan. Porque era tan neoliberal, que ni siquiera los organismos que impusieron el neoliberalismo en el mundo hubieran tolerado esa visión que está en esa ley.

Es una ley escrita por la Cámara Venezolana del Libro (CVL), la Cámara Venezolana de Importadores de Papel, la Cámara Venezolana de Editores independientes, es decir por el sector privado. Y le dieron al Estado, que es el que sostiene finalmente de manera económica y el que tiene la obligación de garantizar los derechos constitucionales un papel subsidiario. Pero es un papel subsidiario menor, el sector privado domina pero el Estado paga. Entonces digamos esa ley...

- ¿Nos puedes dar un ejemplo de eso?

- Bueno, por ejemplo antes las Ferias del Libro. Nosotros ahora vamos a hacer la 8va Feria Internacional del Libro de Venezuela (FILVEN), pero antes se llamaba Feria Internacional del Libro de Caracas, osea que si siguiéramos con la Feria Internacional del Libro de Caracas y no le hubiésemos cambiado el nombre habríamos pasado ya la edición nro 20.

Entonces, la Cámara Venezolana del Libro junto con el Instituto que precedió al CENAL que se llamaba Fundalibro, eran los que organizaban la Feria del Libro de Caracas, una Feria comercial con mucha participación de países, bastante buena debo decir, yo iba a la Feria, pero ¿quién pagaba? el Estadio y ¿quién se lucraba? los privados.

Y no había ninguna misión complementaria al hecho comercial, eso cambio completamente aunque la ley sigue siendo la misma. Pero nosotros por la vía de los hechos hemos ido transformando no sólo la institucionalidad sino la intencionalidad de lo que se hace desde los distintos organismos públicos.

De alguna manera al crear esto que llamamos la plataforma del libro, es que todos los entes que estamos en el sector libro bajo la coordinación del CENAL, generamos un debate continuo y colegiado de las políticas públicas en Venezuela en materia del libro y de lectura, es digamos, la manera como hemos ido cumpliedo con nuestro cometido y desplazando al criterio neoliberal del CENAL.

Es decir, nosotros creemos que hemos ido logrando progresivamente la popularización de la política pública, no hablamos sino del pueblo asumiendo, apoderándose y empoderándose de las políticas públicas en Venezuela, la Feria nuestra, la FILVEN que es una gratuita, antes se pagaba.


- ¿Cuáles son las principales diferencias con las anteriores ferias organizadas durante el puntofijismo (Cuarta República)?

- Muchas, pasó a un parque público, es una feria a cielo abierto donde no hay una competencia de stands, todos los stands son iguales, no cobramos entrada y lo que cobramos por alquiler de stand no es ni la décima parte de los que nos cuesta. Ahí participa todo el que quiera inscribirse -incluído los privados- y cada día se inscriben más porque saben que en Venezuela se venden más libros.

La FILVEN (Feria Internacional del Libro de Venezuela) va a seguir creciendo, que es uno de los logros ¿Por qué cambió el nombre? Porque no sólo cambio la denominación, cambio la regionalización de la Feria. No es lógico que aquel que quiera ir a una feria del libro tenga que trasladarse todavía hasta Caracas.

Sucede y va a seguir sucediendo porque Caracas es el espacio central donde se concentra todo, pero también tenemos nuestras ferias locales en cada uno de los estados, en el que hay expoventa de libros, programación artística, literaria, van escritores, todavía queremos que crezcan más e incluso la FILVEN ha llegado a municipalizarse .

Es decir, hay estados en los que la feria no sólo se organiza en la capital del estado, sino que en los municipios también se organizan ferias de 2 o 3 días, muy modestas a una escala menor. No quiero decir que con el hecho de que la FILVEN se organice en todo el país, en todo los lugares no son iguales. De pronto son sólo unos toldos con unas mesas pero esas llevan miles de personas también, si nosotros tenemos 180 mil visitas en Caracas pero hay estados del país como en el caso de Barinas, donde la feria fue a finales de julio y fue todo un éxito en concurrencia de gente.


- ¿La FILVEN y el resto de ferias se hacen en la misma fecha?

- No, van avanzando, tenemos FILVEN que dura hasta diciembre, en el estado de Falcón se va a organizar en diciembre, en el mes de junio se organizaron en los estados de Carabobo, Barinas, en el mes de mayo se hizo en Cojedes, Huarico, Lara.

Es decir, los 24 estado cubiertos con la Feria pero depende también de la capacidad de cada estado, de las fechas más propicias, en algunos lugares llueve más que en otro, si es época escolar. Por ejemplo, en el estado Miranda que es el más grande, tenemos 3 ferias, 2 que ya se produjeron en ejes rurales, en la zona Barlovento que es una zona afrodescendiente, en los Valles del Tuy y en el estado Miranda, que es área Metropolitana de Caracas la vamos a hacer en el mes de septiembre.

Hay un concepto de democratización de la feria y del entusiasmo. Porque mira aunque sea una feria pequeñita, la gente se siente tomada en cuenta, la gente siente que también hay una feria en su estado. Y está sucediendo un fenómeno interesante, que la Cámara Venezolana del Libro (CAVE) Libro que se había replegado, estamos dando ferias del libro -bastante buenas por cierto- en aquellos estados y municipios dominados por la oposición. Nosotros tenemos una relación más o menos buena con CAVE Libro

La CAVE Libros está organizando la feria en los estados y en municipios donde gobierna la oposición al presidente Chávez, es decir que nos está yendo bastante bien porque hasta ellos quieren comprar libros y nosotros hemos participado en esa feria con un stand, participamos toda la plataforma del libro, pagamos por participar, nos invitan y nosotros vamos, no vamos a perder ningún terreno tampoco, pero además somos los que más vendemos. Es decir, hasta en el territorio de ellos son nuestros libros los que más se venden.

- ¿Cuál es el trabajo que realiza CAVE Libro?

- La Cámara venezolana del libro, que es el equivalente a la Cámara Peruana del Libro, ello son la cámara que agrupa al sector privado. Por eso el día de la inauguración (se refiere a la 16 Feria Internacional del Libro de Lima donde Venezuela fue el país invitado) que me dijeron que el CENAL era como la Cámara Peruana del Libro yo dije no, primero uno es del sector público y el otro del privado. Nosotros tenemos una obligación con el pueblo venezolano. Ellos tienen un compromiso con la venta y la comercialización del libro y la lectura.

- ¿Eso lo hacen en ciudades grandes?

- No, eso lo están haciendo en municipios pequeños pero en el área metropolitana de Caracas donde hay una densidad de población y en algunos estados más o menos grandes como el estado Lara.

Más allá que CAVE Libros nos diga discursivamente que apoyan las políticas del gobierno, en la práctica, por ejemplo hace poco trajeron a la difrectora de la Feria Internacional del Libro de Guadalajara a darles cursos a ellos, no nos invitaron a nosotros, osea a organizadores de feria, perdón la feria más grande es la FILVEN.

Y hay una característica de la FILVEN que no tienen esas ferias -aunque también las hacen en parques y en plazas- que es la alegría de la feria. La Feria del Libro en Venezuela es una cosa que mueve todo el mundo, todos los canales de televisión sean de la tendencia que sean hablan de la feria, todas las radios hablan de la feria, hay digamos cobertura continua de la feria.

Emisoras de radio que se ubican allí, como Radio Nacional de Venezuela (RNV) ALBA Ciudad, es decir una cantidad de emisoras que se instalan en la feria durante los 12 días que esta dura. Los canales, hasta los periódicos más reaccionarios, todo el mundo cubre la feria todos los días.

Es decir, la Feria Internacional del Libro de Venezuela es el gran evento en Venezuela, y ahí uno se encuentra con todo el mundo, hay gente que va y la ve una vez al año y la ve en la feria del libro. Entonces, es un espacio social, rico, de encuentro. Nuestra programación al igual que acá (16 Feria Internacional del Libro de Lima) es muy grande, hemos llegado a tener hasta 600 actividades complementarias a la feria.


- ¿Cuánto tiempo duran las ferias?

- Dura 12 días, empieza el viernes y dura hasta el siguiente domingo. Bueno antes lo inauguraba el Presidente de la República en persona, incluso un año dijo ustedes ya saben los libros se roban, róbense los libros. Los 2 últimos años él no ha podido asisitir, este año la inauguró el vicepresidente Elías Jaua.

Y digamos sentimos un respaldo muy grande no sólo del Estado, sino del pueblo, la gente se lleva bolsas y bolsas de libros. Solamente en el stand nuestro el de la Plataforma del Libro se vendieron 90 mil libros, ahora en marzo en la FILVEN.

Entonces, claro para nosotros la feria que digamos es el fuerte del Centro Nacional del Libro (CENAL) es llevar las cifras, porque nosotros tenemos a cargo el Observatorio Venezolano del Libro, tenemos la Agencia Literaria Venezolana, la parte de formación y plan de lectura y la participación en ferias nacionales e internacionales.

Tanto la FILVEN como las ferias que organizan las universidades y estas otras iniciativas privadas y nosotros somos los responsable también de coordinar todo y de financiar todo lo atinente a nuestra participación en ferias internacionales. Eso no lo hace la Cámara sino el Estado, por eso es que aquí se ha producido como una especie de cortocircuito porque el tratamiento que le da el sector privado es distinto al que le da el sector público. Nosotros cuando invitamos a alguien a la Feria del Libro lo invitamos, no le cobramos.

- Tienen el Observatorio y el Plan de Lectura, primero la UNESCO declara a Venezuela país libre de analfabetismo ¿Cómo se desarrolla este plan de lectura que va de la mano con la impresión de libros? ¿Cuáles son los próximos objetivos?

- Han habido varios y debemos reconocer autocríticamente que no han funcionado. Desde que se arrancó con el gobierno bolivariano han habido por lo menos 3 planes de lectura: el Plan Nacional de Lectura, Leer es entender y este último el Plan Revolucionario de Lectura -tiene 2 años-. Es el plan del presidente, es el plan que el presidente dijo ya está, armenme una metología, un proyecto, unos espacios para la difusión de la lectura y la promoción de la lectura porque él es un promotor de la lectura.


Este plan se estructuró con cuatro ministerios responsables de ejecutar el plan; Ministerio de Cultura, de Educación Básica, Educación Universitaria y el Ministerio de las Comunas.

Entonces, este último plan estaba dirigido a la población, a los colectivos, es decir a promover la lectura colectiva, el estudio y se definieron como las unidades sociales, que llamamos las escuadras de lectura, estas iban ascendiendo, cambiando de color como si fuera un análogo al judo por ejemplo, pasaban del naranja al escuadra negra, que era cuando ya se había alcanzado un nivel de consolidación del grupo.

- ¿Quiénes conformaban estos grupos?

- Estaba integrado por pobladores, había promotores que iban a las comunidades a organizar a la gente que tuviera algún interés en la lectura y había otras escuadras que se formaban por iniciativa de un grupo de personas, que vio el plan, le pareció atractivo y se quiso anotar, este fue mi caso, cuando yo no trabajaba en el CENAL, trabajaba en la Cancillería y cuando vimos la cuestión del Plan Revolución de la Lectura, ubicamos el Nro telefónico 0800 Lectura, llamamos, nos inscribimos y montamos nuestra escuadra de lectura.

Es decir, había distintos orígenes para conformar las escuadras de lectura, se les dotó de la Biblioteca de los Consejos Comunales, que son estas famosas de 100 títulos, 50 mil se editaron, son 150 millones de libros con 100 títulos de todo tipo. Había poesía, narrativa, salieron libros muy duros de Marx y había libros maravillosos como los de poesía de Gustavo Pereira, había de todo.

Cuál era el problema en el plan que estamos rectificando ahora, porque sigue, el plan sigue, estamos rectificando ahora, tiene dos años y está funcionando con sus errores, pero sigue funcionando y hay escuadras activas en muchos estados.

Parte el problema que tuvimos es que los promotores culturales no necesariamente eran promotores de lectura, es decir, tu puedes promover una organización, que la gente lea, pero si tu no eres un lector, dificilmente puedes motivar a la lectura.


Y el segundo fue que los escritores no estuvieron liderando el proceso de promoción de lectura, eso está cambiando. Ellos estaban involucrados, la Red Nacional de Escritores Socialistas de Venezuela pero no llegaron a ser como la conexión orgánica de manera de que siempre hubiese un escritor presente en la jornada de promoción de lectura.

Ahora la hemos retomado con mucho éxito, desde hace 4 meses ya empezamos por todo el país a dar otra vez talleres de promoción de lectura y tienen un caracter teorico-práctico, entonces directamente se está promoviendo la lectura en la comunidad y ya no hay intermediación.

Hemos hecho actividades más eventuales pero muy lindas que son las maratones de lectura, tenemos una actividad permanente en Caracas en el Metro Cable (furnicular que sube el cerro Ávila) ubicado en una barrio popular que es San Agustín y ahí la llamamos La Palabra colgante.

Entonces, se lee en la parte de la estación y se va leyendo en los vagones y se va pasando el libro entre las personas y los maratones de lectores lo hemos hecho en todo el país. No es una actividad que inventó Venezuela pero nos está funcionando muy bien, la gente se reúne y en espacio de 2 o 3 horas leen un libro 60, 70, 80 personas. Y no sólo son las personas que leen, son las personas que están ahí y escuchan el libro.

- ¿Cuál es el balance que puedes hacer de todos estos planes, teniendo en cuenta la importancia política que se desarrolla en Venezuela? porque la lectura promueve seres críticos en una sociedad...

- El balance es que nosotros vamos avanzando, no lo hemos logrado todavía, hemos ido avanzando en el ejercicio de la lectura en dos ámbitos distintos; la lectura que es un acto íntimo, la lectura es un acto personal, un acto sagrado entre el lector y el libro. Pero también hemos abierto ese otro espacio del estudio, no ya digamos de la lectura como goce sino del estudio colectivo, del debate.

Y por supuesto de se debate las ideas, de esa apropiación del conocimiento y de la generación del mismo conocimiento que surge del poder popular. Es, como vamos elevando el nivel de conciencia de los venezolanos y la capacidad crítica para analizar su propia realidad.


Con las fallas que reconocemos, han tenido los planes de lectura, hay un plan de lectura que llegó al Ministerio de Educación, que ya en espacios convencionales igual que la biblioteca nacional colabora con nosotros.

Es decir, el Plan de Lectura se hace en el Ministerio de Cultura desde, tanto la Biblioteca Nacional como de los otros entes con el Centro Nacional del Libro.

Y hemos ido avanzando en la evaluación, en la crítica, en darnos cuenta de cuáles son los espacios en los que estamos fallando, en donde no estamos entrando. Pero más allá de los planes estructurados de lectura con una metodología, con una distribución territorial, con un voluntariado que trabaja en el Plan de Lectura. Es evidente que en Venezuela se está leyendo muchísimo, con plan o sin plan la gente está leyendo.


Yásser Gómez. Periodista. Editor de Mariátegui. La revista de las ideas.

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