Perú: Ministro de Energía y Minas, Herrera Descalzi dice que no sabía que el avión era de minera Yanacocha

No hay motivo para reírse cuando están en peligro fuentes de agua, (izq) Roque Benavides (centro) Herrera Descalzi en Cajamarca.

Ministro Herrera Descalzi y Roque Benavides (foto derecha) salieron en el mismo avión de Cajamarca hacia Lima.

... a pesar de que retornó junto con Roque Benavides a Lima

Mariátegui
06/11/11

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Singular respuesta del ministro: “Yo no sabía de quién era el avión”. Titular de Energía y Minas señala que perdió el vuelo. Afirma que no sabía que viajaría con accionista del proyecto Conga Roque Benavides.

El titular de Energía y Minas, Carlos Herrera Descalzi, ensayó una dudosa respuesta ante el periodista que a boca de jarro le preguntó: ¿Ministro, por qué utilizó el avión privado de Yanacocha para retornar a Lima después de que revisara en Cajamarca la zona donde se ejecuta Conga, justo el proyecto de la minera dueña de la nave?

“Yo llegué (al aeropuerto) a tomar mi vuelo en LAN. En el camino tropecé con un camarógrafo que quiso entrevistarme, y como estaba de prisa, no pude, igual llegué tarde y no me dejaron entrar. En el segundo piso alguien me dijo que había uno más tarde y me pidió que esperase si podía conseguir un vuelo privado”, respondió el ministro Herrera Descalzi.

Aseguró que desconocía que haría el viaje con Roque Benavides, gerente general de Minas Buenaventura y accionista del proyecto cuprífero Conga.

El camarógrafo, a quien alude el titular del MEM, es Marco Uriarte, quien realizó el siguiente relato: “El jefe de prensa que acompañaba al ministro dijo que estaban esperando la salida de un vuelo privado, pero no quiso decir de quién era la nave aérea”.

Tan pronto llegó Roque Benavides al aeropuerto, el ministro Herrera abordó la nave, agregó. Según Uriarte, el aeropuerto postergó por media hora más su cierre de operaciones, lo que se hizo apenas despegó el avión.

“Fue casualidad”

Carlos Santa Cruz, vicepresidente de Newmont en Sudamérica, estimó que el viaje del ministro en un avión de Yanacocha fue casualidad: “No hay que buscar intenciones ocultas donde no las hay”.

Luego añadió que al tener un avión a punto de partir a Lima le ofrecieron esa facilidad al ministro porque había perdido su vuelo.
“Me imagino que él tendría algunas urgencias de regresar a Lima lo antes posible. Reitero: no ha habido nada más que esa coincidencia”, anotó el alto funcionario.
Yanacocha dice no a consulta previa
Carlos Santa Cruz, vicepresidente de Operaciones de Newmont Mining Corporation-Yanacocha para América Latina, aseguró que las empresas que ejecutan el proyecto Minas Conga están abiertas al diálogo, pero aclaró que se opone a realizar un nuevo proceso de consulta previa, más aún con un reglamento que todavía no se ha elaborado. Indicó que esto tomará años y además implicaría tirarse todo el portafolio de sus inversiones previstas.

“Todo el tiempo que toma el planeamiento de este trabajo, de una inversión de esta envergadura, toma años. Si fuera tan sencillo ir a un proceso de consulta y revisar todo de nuevo, bueno encantado, pero eso no va a ocurrir, eso va a tomar mucho tiempo. Si para el futuro, el tema de la consulta va a ayudar encantado”, dijo.

Santa Cruz recordó que ya las autoridades competentes del Ministerio de Energía y los alcaldes lideraron un proceso de consulta y de audiencias en el que participaron cerca de 4 mil personas.


Cajamarca: Proyecto Conga en la mira Oro vs Agua

Una de las lagunas que desaparecerían por la extracción del oro con lo que se secarían manantiales y ríos

El proyecto minero Conga, una de las más grandes inversiones de los últimos años –4,800 millones de dólares–, se encuentra en riesgo. Para que este proyecto aurífero de Yanacocha pueda realizarse tendrán que desaparecer cuatro lagunas en las alturas de Cajamarca y Celendín, hecho que ha motivado una férrea oposición de los pobladores de la zona.

El jet privado de Buenaventura aterrizó el miércoles en el aeropuerto de Cajamarca. Llevaba entre sus pasajeros a Roque Benavides, uno de los hombres más ricos del país, quien iba a supervisar personalmente el conflicto generado alrededor del proyecto minero Conga. Su presencia allí revela el interés –y también la preocupación– por el futuro de este proyecto minero con la mayor inversión de los últimos años. Conga va con los cuidados del medio ambiente, ha dicho el Ejecutivo. La población de Cajamarca insiste en que no va.

Una semana antes, Roque Benavides estuvo también en la Presidencia del Consejo de Ministros buscando el respaldo del Ejecutivo a este proyecto desarrollado por la minera Yanacocha, cuyos principales socios son la Newmont Mining Corporation y Compañía de Minas Buenaventura. No era para menos, Gregorio Santos, presidente regional de Cajamarca, y los alcaldes de la provincia de Celendín han pedido que se revise el Estudio de Impacto Ambiental (EIA) de Conga, el documento que abre las puertas al inicio de sus operaciones.

Ese respaldo llegó pero no con el énfasis que hubiera esperado Yanacocha. Si bien el premier Salomón Lerner ha manifestado el interés del gobierno en que el proyecto se ejecute, lo ha condicionado al cuidado del medio ambiente. El presidente Ollanta Humala ha sido un poco más cauto todavía. Ha asegurado que van a destrabarse las inversiones pero escuchando siempre a la gente.

Esta posición estaría evidenciando un cambio en el manejo de la relación gubernamental con el sector minero. El propósito, han explicado fuentes del Ejecutivo, es recuperar la autoridad sobre este sector, cuidando de no poner en riesgo las inversiones mineras.

Con Yanacocha esta posición ha sido clara. Se les ha dicho que todas las reuniones serán en la PCM y que habrá la misma disposición para conversar también con las autoridades que se oponen al proyecto. Se les ha recordado, además, que han mostrado poca eficiencia en el manejo del óbolo minero –han ejecutado hasta julio el 58% de sus recursos– y que hay actitudes que deben cambiar en su relación con la comunidad. No ha caído bien, por ejemplo, la movilización de trabajadores de Yanacocha, en respuesta al plazo otorgado por el alcalde del distrito de Huasmin, para que retiren su maquinaria de la zona.

Oro y cobre

El proyecto minero Conga está asentado entre las provincias de Celendín y Cajamarca, en una zona de cabecera de cuenca y nacientes de agua. Resulta que las reservas de oro, cobre y plata que Yanacocha pretende extraer se encuentran debajo de bofedales y cuatro lagunas que tendrán que desaparecer porque la explotación minera se realizará a tajo abierto. A cambio Yanacocha ha ofrecido construir 4 reservorios que duplicarán en volumen el agua de las lagunas.

Allí radica la principal razón del por qué la población, las autoridades locales y las organizaciones ambientalistas se oponen al proyecto. Milton Sánchez Cubas, presidente de la Plataforma Interinstitucional Celendina, está convencido de que la destrucción de esas lagunas tendrá un impacto irremediable en 700 manantiales, más de 100 captaciones de agua para el consumo humano y 18 canales de riego. “En este proyecto son 4 lagunas que se pierden, pero si miramos la minería de Cajamarca en su conjunto se han perdido ya varias fuentes de agua”, señala.

A ello le suma la forma poco clara en que se le dio luz verde al EIA. Ese documento fue aprobado por Felipe Ramírez del Pino, un funcionario del Ministerio de Energía y Minas que anteriormente fue gerente de Yanacocha. Todo ello, dice, son argumentos sólidos –no políticos– para declarar improcedente el EIA y para demostrar que Conga es inviable social y ambientalmente.

Para Javier Velarde, vicepresidente regional de Asuntos Legales y Corporativos de Newmont Perú, no cabe una discusión sobre la aprobación del EIA. Este documento fue aprobado en octubre del 2010 y en el camino se han acogido las observaciones formuladas por la población. “Si hay que explicarlo más se puede hacer, lo que no se puede hacer es cuestionar temas legalmente aprobados porque se pierde la estabilidad jurídica”, señala. Sobre los cuestionamientos al manejo del agua, señala que los cuatro reservorios que van a construir –tres para la población y uno para las operaciones de la mina– permitirán que la población tenga también ese recurso fuera de las épocas de lluvia y que habrá un plan de manejo para mitigar el impacto que pueda darse en la biodiversidad de la zona.

Por ello no es correcto decir que la población se opone al proyecto. Lo que hay, señala Velarde, son pequeños grupos que no quieren la minería porque tienen una visión distinta. “Son conservacionistas y quieren preservar las cosas tal cual, incluida la pobreza”.

Se refiere a los activistas de la ONG Grufides que lidera el padre Marco Arana. El sacerdote no solo ha cuestionado el proyecto Conga sino también lo que ha significado la presencia de Yanacocha en Cajamarca, una región que tiene la más alta inversión minera y la más alta conflictividad social. Esa empresa minera, dice el padre Arana, no tiene una buena política laboral –solo el 10% de su trabajadores está sindicalizado–, ha tenido graves problemas ambientales como el derrame de mercurio en Choropampa, ha estado involucrado en espionaje telefónico y mantiene procesos judiciales con municipios que han dado normas para la conservación del medio ambiente, como ocurrió con Baños del Inca. Arana también objeta el real beneficio para Cajamarca de los 4,800 millones de inversión que tiene el proyecto porque el 70% de ese monto se destinará a comprar, fuera del país, el más grande molino de minerales del mundo.

El futuro del proyecto Conga es todavía incierto. El jueves, opositores al proyecto marcharon hacia la zona donde Yanacocha realiza trabajos preliminares para el inicio de sus operaciones, previsto todavía para el 2014. Ello obligó a que la empresa suspenda por momentos sus operaciones. Ahora se espera que el diálogo dé resultados pero lo que podría poner sombras en ese proceso sería la errada decisión del ministro de Energía y Minas, Carlos Herrera, de aceptar la invitación de Roque Benavides para regresar a Lima en su jet privado. Ese hecho ha motivado encendidas críticas en Cajamarca, que ha convocado ya a un paro cívico para el 9 de noviembre.

Nuevo estudio

Aun cuando el Estudio de Impacto Ambiental (EIA) de Conga ya está aprobado, el Ejecutivo encontraría la salida a este conflicto en la realización de un nuevo estudio hidrogeológico. Ese estudio está recomendado en el EIA pero para ser entregado todavía en el 2013. Sería encargado por el gobierno a una consultora independiente para que pueda generar confianza entre quienes se oponen al proyecto minero. En diálogo con Domingo, la viceministra de Minas, Susana Vilca, señaló que aunque los plazos para cuestionar el EIA hayan vencido, los cuestionamientos ameritan una estudio imparcial que debe ser producto de la mesa de diálogo.


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