Mariátegui
07/11/11
En el auditorio Jorge E. Castañeda de la Facultad de Derecho y Ciencia Política de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos (UNMSM) de Lima, se realizó la conferencia: El Che y la solidaridad internacionalista, en la que participó Rosa Aurora Freijanes Coca, esposa de Fernando González, uno de los cinco patriotas cubanos prisioneros en EE.UU. por luchar contra el terrorismo. Además intervino Aleida Guevara Marcha (la hija del Che).
Contagiada por el entusiasmo de los asistentes Rosa Freijanes ofreció un emotivo discurso, mientras era interrumpida cada cierto tiempo por los universitarios quienes entonaban vivas a Cuba, al Che Guevara y exigiendo libertad para los cinco patriotas cubanos. A continuación lo más importante de su disertación:
"Pertenecemos a una generaciòn que crecimos diciendo y repitiendo todos los días en el matutino de la escuela, que queríamos ser como el Che. Y siempre nos hemos reforzado por ser como el Che, pero el Che es una meta demasiado alta, es muy difícil, lo más que uno puede ser es intentar es casi imposible, un sueño muy grande pero también en ese intento se van librando cosas grandes.
La más pequeña de los hijos de los cinco, tenía cuatro meses de nacida cuando su papá fue apresado, por lo tanto hoy tiene trece años.
No es fácil crecer en un hogar de un padre que es un héroe, que es el mejor padre que se pudo haber escogido para un hijo, pero que se padezca de él tanto, en cada instante y no en el amor y no en el afecto pero sí físicamente.
Son niños que han tenido que crecer sin la presencia física del padre, muchas veces he dicho, un padre siempre hace falta, hace falta para compartir los momentos de alegría, para que nos den un consejo e incluso para que nos den un regaño cuando estemos equivocados, porque siempre son necesarios, los padres siempre son necesarios.
Creo que ustedes no están aquí por gusto, están aquí porque tienen un concepto alto de compromiso con su sociedad y con su patria sino no estarían aquí, vienen a enriquecerse espiritualmente, compartir ideas.
Desde el momento en que detuvieron a Rene, Gerardo, Ramón, Fernando y Antonio, por que un país que dice que está luchando contra el terrorismo no puede haber detenido a cinco anti terroristas cubanos. Lo primero que tenían que haber hecho es detener a los terroristas que caminan libremente en las calles de Miami, que se reúnen para organizar acciones terroristas contra Cuba.
La última fue la muerte de un jóven italiano que se encontraba en el lobie de un hotel en Cuba, disfrutando de sus vacaciones, tenía 32 años.
Y Luis Posada Carriles tuvo la osadía delante de una cámara de televisión de decir que ese jóven había muerto en Cuba porque estaba en el momento y en el lugar equivocado.
Me pregunto ¿cómo puede ser el lugar y el momento equivocado, el lobie de un hotel el de una persona pasando unas vacaciones en La Habana?
A los cubanos han tratado de sofocarnos por más de cincuenta años, los cubanos hemos vivido con el bloqueo, mi generación ya ha nacido con el bloqueo y aquí estamos.
No importa cuánto tiempo más tengamos que seguirlo denunciando y cuánto tiempo más necesitemos la solidaridad para seguir luchando en contra del bloqueo.
Pero compañeros, no podemos pensar que nuestros compañeros que están en prisión tengan que pasar cincuenta años más para ser liberados.
Realmente una condena de 30 años, de Andrés, Antonio tiene una condena de 21 años más diez meses en prisión y cuando salga de prisión tiene que estar cinco años de libertad supervisada.
René salió en libertad el día siete de octubre pero tiene que permanecer dentro de los EE.UU. tres años más con libertad condicional, su familia vive en Cuba.
La vida de un ser humano es chiquita, pero 50 años en la historia de un pueblo es casi aprendiendo a caminar pero si René tiene 55 años tenemos que arrancárselo de las manos.
Tenemos que traer a los cinco, volverán pero no porque van a volver en el tiempo porque le toca, volverán porque se los tenemos que arrancar, los tenemos que hacer regresar a Cuba.
Y para eso necesitamos mucho de la solidaridad y del apoyo de todos ustedes, de todos y cada uno.
Y no se me pongan a pensar que la acción que están acometiendo es grande, es importante o es pequeña. No hay acción pequeña en las luchas políticas, todas son grandes y todas son importantes.
Ninguna batalla que hay por la liberación de los presos, no se ha ganado sino fuera por la lucha de las masas.
Tenemos el ejemplo de Nelson Mandela, él no salió por un acto jurídico, salió en libertad porque su pueblo empezó a exigirlo y después la humanidad entera empezó a reclamar la liberación de Mandela.
Los luchadores independentistas puertoriqueños no fueron liberados por una acción judicial, fueron liberados por la lucha en las calles de su pueblo y de muchos pueblos del mundo que los apoyaron y los siguieron.
Entendí también que la persona que es presa política tiene una fortaleza que es muy importante, que es las ideas y las convicciones en las que cree.
Si usted se aferra a eso, no importa el tiempo que tenga que estar pasando en prisión, porque usted sale de la prisión más fortalecido, más maduro, más convencido.
Desde el fondo de mi corazón a los peruanos les presto a los cinco, que sea una bandera para todos".
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