Redacción Mariátegui
19/05/14
Lima.- Un viaje a las huacas, a su significado cultural, estético y civilizatorio mediante la imagen, así podemos definir a Guardianes el libro de fotografías de José Carlos Orrillo.
Esta pulcra edición ha sido publicada por la Biblioteca Abraham Valdelomar, la que se presentó junto a una muestra de la misma, en la Galería Enlace Arte Contemporáneo.
Intérprete de la naturaleza
Alberto Benavides Ganoza, escritor, editor, promotor cultural y director de la Biblioteca Abraham Valdelomar afirma que conoce el trabajo de José Carlos desde hace mucho tiempo y que le consta su amor por el paisaje, las huacas, los cerros, los ríos.
Asegura que Abraham Valdelomar decía que ´el artista es un intérprete de la naturaleza´, “esto que está ahí y no es tan fácil, precisamente porque la naturaleza no se nos revela así nomás, necesitamos mucho silencio, mucho escuchar, tener un poco de eso de lo cual los artistas son interpretes”.
“Y bueno creo que José Carlos nos logra impactar y hacer ver algunas cosas interesantes en el libro a través de sus fotografías y a mí me honra mucho que el haya escogido textos míos para acompañar sus fotografías”, agrega.
Volver al lugar originario
De manera contundente el artista visual, Carlos Runcie Tanaka, admite que al ver las imágenes de José Carlos Orrillo y al leer los textos de Alberto Benavides “he podido sentir la sensación de volver a un lugar originario, de volver a recorrer un lugar donde ese espíritu de las cosas fluye y perdura. Un espíritu que coexiste siempre con nosotros, fuera, dentro o alrededor, un espacio sin límites representado por materia eterna, tierra, rocas, paisaje, lo vemos en las fotografías contundentes y silenciosas de José Carlos, un lugar al cual pertenecemos”.
Una resistencia
Para Manuel Munive, crítico de artes visuales, se debe resaltar la importancia de los libros de arte, “el catálogo de arte es una cosa fundamental sobre todo en un país como el nuestro donde hay museos elitistas pero no generosos, entonces los libros son los museos, entonces los libros ocupan ese espacio de los museos que aún no tenemos”, señala.
Asimismo, afirma: “por eso creo que al publicar un libro de arte –refiriéndose a la obra de José Carlos- es fundamentalmente una resistencia de hacer un poco de museo impreso, hasta que por fin la gente sea tan generosa de poder brindar todo lo que tiene a los demás sin ningún tipo de elitización”.
Cerro Blanco de Moche, Trujillo, La Libertad.
Templos del silencio
Para José Carlos Orrillo Puga, Lima, Perú (1973), fotógrafo y artista visual autodidacta, autor del libro y de la muestra, asegura que “los espacios de registro donde se han tomado estas fotos son templos del silencio, no hay que olvidarse de eso, son lugares que en sí mismos están cargados de una belleza y de una poesía increíble y son lugares por los cuales yo he caminado, antes incluso de empezar a hacer este proyecto por una necesidad vital. Caminar para mí es como una meditación es una manera de encontrarse con su propia o más antigua esencia de las raíces”.
Asimismo destaca que “el proyecto Guardianes es un viaje interior de las huacas, de estos cerros, de estas piedras, es una manera de sugerir de que el paisaje y la tierra están vivos, de que este sentido de decir hay que respetar la naturaleza, no es un cliché publicitario es una necesidad vital del hombre, de cada uno de nosotros”.
“Quiero que Guardianes sirva como un acto de recordar; que no estamos solos en la tierra, que somos una criatura más entre muchas especies de animales, vegetales y minerales. Y el hombre creyendo ser el centro está perdiendo mucho de esta visión, de esta energía”, agrega.
“Y sobre todo en estos lugares donde ha habido una presencia pre hispánica, porque los hombres antiguos tenían esta conexión”, finaliza José Carlos.
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