Mariátegui
28/03/11
"Probablemente los periodistas que día a día tratan de denigrar al Presidente, a nuestra revolución se consideran Montalvos y me consideran a mi García Moreno, pero aquí no esta García Moreno y ni de lejos existe un Montalvo", manifestó el Presidente Rafael Correa en relación a la postura que tiene cierta prensa frente a las acciones del Gobierno.
Este discurso lo pronunció durante el acto Cívico Patriótico en homenaje a la Recuperación de los Bienes Emblemáticos de la Revolución Alfarista. El Mandatario aseguró que los representantes del pasado, siguen ejerciendo su influencia nefasta desde las sombras y continúan tramando sus asaltos al poder, siguen arrastrando su infamia, negándole a la Patria sus derechos de avanzar, de perfeccionar sus mecanismos democráticos.
Agregó que con honrosa coincidencia este Gobierno enfrenta los mismos enemigos que enfrentó el viejo luchador, Eloy Alfaro, que probablemente sean los sectores más retardatarios de la jerarquía eclesiástica.
Recordó que el viejo luchador decía que si en lugar de afrontar el peligro hubiera seguido al enemigo habría tenido mucha paz.
"Pero para nosotros esa paz significa pisotear los derechos, pisotear las libertades. Mantener la desigualdad de siempre, someternos a los poderes fácticos y que nos aplaudan los medios de comunicación, los banqueros, las cámaras de la producción, pero al igual que Alfaro no hemos nacido para eso, sino para cumplir con nuestro pueblo", dijo.
Asimismo señaló que es necesario recordar quiénes mataron a Alfaro, "pues fue la prensa corrupta la que incentivó aquello, uno de los capítulos más tristes de la historia ecuatoriana".
Pidió a la ciudadanía no olvidar, a la prensa del tiempo de Alfaro, no muy diferente a la actual. "Si así trató esta prensa corrupta al mejor ecuatoriano de todos los tiempos, qué podemos esperar nosotros compatriotas", manifestó Correa, luego de leer algunas notas de diarios de la época del viejo Luchador.
Además recordó que cuando Alfaro estuvo en el Gobierno tuvo que enfrentar los intereses de grupos de poder, a los conservadores. "Que no se quedaron en paz y trabajaron en su contra, como están haciendo ahora", indicó el Presidente.
También señaló que hay ciertos obispos que supuestamente llaman a reflexionar al pueblo y lo que realmente están haciendo es impedir las libertades. "Utilizando el lenguaje que utiliza la oposición para asustar a nuestra gente. Hasta cuándo", se cuestionó.
El gobernante aseguró que aspira a que algún día cambie la Conferencia Espiscopal para nuevamente tener esa Iglesia Progresista, que se preocupe de la promoción humana, comprometida con su gente.
"Hay ciertos obispos que cada vez están más lejos de su pueblo y más cerca -tan solo- del billete y del poder económico", recalcó.
El Jefe de Estado aseguró que Alfaro más que liberal, era radical, pues los liberales de ese tiempo buscaban propiciar cambios, mientras que los radicales buscaban la revolución. "Y más que una revolución radical, podemos hablar de una revolución alfarista, porque fue mucho más que un simple liberalismo", manifestó Correa.
Indicó que el viejo Luchador siempre se empeñó en defender las libertades públicas, en proteger el mercado interno y en promover el desarrollo nacional, que en ese entonces significaba llevar al Ecuador al siglo XX. Mientras que dijo, ahora, la Revolución Ciudadana intenta llevar a este Ecuador al siglo XXI.
Aseguró que el espíritu de Alfaro está hoy más que nunca vivo y combatiendo a diario en cada militante positivo que trabaja por la Patria renacida.
"Nosotros vamos a mantener encendida la antorcha de quien instituyó la libertad de pensamiento, la enseñanza pública Laica y obligatoria", manifestó el Mandatario, quien enfatizó que Alfaro es un ejemplo de la lucha de la dignidad.
Durante su intervención, el Presidente enfatizó que el país vive un proceso de cambio profundo, desde la Constitución, lo que marcó el inicio de una nueva época. "Hay que segurirla perfeccionando, complementado con leyes, políticas públicas, con acciones concretas", enfatizó.
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