Mariátegui
24/05/11
Editorial
Desde el equipo del periódico Proceso seguimos considerando urgente la necesidad de debatir de manera abierta y honesta el rumbo de la revolución, desprendidos del simple panfleto que degrada y vulgariza el fondo político de los asuntos que hoy debemos debatir. Recientemente conmemoramos 9 años de los sucesos de abril del 2002,
hechos gloriosos donde se puso en manifiesto el extraordinario espíritu combativo y constituyente de nuestro pueblo, quien, sin esperar directrices de ninguna estructura burocrática se lanzó a la calle para hacer y hacerse respetar en su voluntad y dignidad patriótica. Hoy estamos viendo con preocupación como desde la institucionalización del estado se pretende domar y burocratizar el movimiento popular en un intento de menguar su espíritu rebelde y contestatario; muestra de ello son las grandes movilizaciones programadas y orquestadas desde el Estado que quitan el carácter, la naturaleza y la identidad mas libre de nuestro pueblo.
Hoy necesitamos, rescatar la fortaleza y el ánimo que caracterizaron los inicios valientes de nuestra revolución, y proseguir con toda la energía e inteligencia necesaria para garantizar los cambios reales, sin perdernos en las redes burocráticas que entorpecen y muchas veces detienen los impulsos orgánicos de un pueblo. Desde nuestro equipo nos sumamos a este sentir colectivo, que llama al urgente rescate del espíritu del 13 de abril, con el esfuerzo y la critica necesaria, para apoyar a un gobierno revolucionario al servicio del pueblo y no de sí mismo.
El pasado lunes 25 de abril, ocurrió un hecho inadmisible, lamentable y desmoralizante para todas las fuerzas revolucionarias del continente. El gobierno Bolivariano de Venezuela en un gesto con la oligarquía más rancia de Latinoamérica (la colombiana) detuvo y entregó a este Narcoestado, al compañero Joaquín Pérez Becerra, ex concejal colombiano, sobreviviente de la Unión Patriótica, periodista del portal noticioso Agencia de Noticias Nueva Colombia (ANNCOL), que en actividades propias de un revolucionario e internacionalista se encontraba de visita en nuestro país.
Desde nuestro equipo rechazamos de forma categórica esta acción que va en contra de los principios revolucionarios más elementales y ponen de manifiesto la conchupancia hipofisiaria que tienen hoy algunos sectores del gobierno con la ultraderecha colombiana. Llamamos a la movilización popular, a la condena en todos los espacios de este tipo de acciones, y la lucha contra la derechización de nuestra revolución Bolivariana.
Los principios no se negocian, revolución es solidaridad….
No a la entrega de nuestros camaradas a sus verdugos.
Libertad para Joaquín y l@s miles de pres@s de conciencia del narco estado colombiano
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