Lima: Hace 18 años 42 trabajadores de empresa Oleotécnica fueron despedidos y aún no reciben beneficios sociales

Foto: Hildebrandt en sus Trece. La empresa ha cambiado de número para no recibir las notificaciones judiciales.

Redacción Revista Mariátegui

07/07/13

La sacada de vuelta a las decisiones judiciales y la influencia propia de su clase social con el poder, le ha permitido a los hermanos Felipe y Andrés Osterling Letts –dueños de la refinería de aceite comestible Oleotécnica S.A.- no pagarles la Compensación por Tiempo de Servicio (CTS) a 42 de sus trabajadores a quienes despidieron hace 18 años, la deuda con ellos asciende a 212 mil 678 dólares y 373 mil 695 soles.

“La pelea que estamos haciendo es por nuestra compensación tiempo de servicio, somos demandantes 42 trabajadores que hasta ahora no podemos concretar por motivo que las empresas y los jueces son corruptos, por esta razón nuestra demanda no avanza”, así Luis Alvites, define la indignación de sus 41 compañeros, Alvites es secretario general del Sindicato de Trabajadores de Oleotécnica S.A., trabajó en la fábrica 29 años con nueve meses  y le deben 29 mil 771 soles.

En 1994 Vittorio de Ferrari era el dueño de Oleotécnica S.A y la relación entre la patronal y los trabajadores iba por buen camino, hasta que ese mismo año la refinería de aceite comestible cambio de dueño.

A pesar de que llegaron con la promesa de no despedir a nadie, los hermanos Felipe y Andrés Osterling Letts (los nuevos dueños) ni bien se acomodaron en sus nuevas oficinas iniciaron los despidos. 

Ahí se empezó esta historia en la que durante 18 años, los trabajadores le han ganado a la empresa Oleotécnica S.A. en todas las instancias del Poder Judicial, teniendo como única resolución en contra el fallo de INDECOPI a favor de los hermanos Osterling Letts.

Así en 1995 el Juzgado de Trabajo del Callao sentenció a favor del sindicato, en 1997 un informe del Colegio de Contadores señaló entre otros aspectos que los dueños de  Oleotécnica S.A estaban vinculados a 8 empresas las cuales no habrían sufrido pérdidas como para declararse insolventes como lo habían solicitado.

10 años después la Corte Suprema exigió a NAASA –otra empresa de los Osterling Letts- el pago de las  sumas adeudadas, entonces se declaró en quiebra para no pagar. Asimismo, INDECOPI solicitó al Poder Judicial que revoque el fallo a favor de los trabajadores pero en el 2007 la Corte Suprema ordenó a INDECOPI abstenerse.

En el 2011 se iba a rematar la fábrica para concretar el pago a los ex trabajadores y la persona encargada fue agredida físicamente y no se pudo realizar el remate.

“La empresa está trabajando hasta hoy, lo que pasa es que la empresa miente, engaña a las autoridades con escritos, se traspasan la fábrica, le cambian de nombre, encima ellos se valen económicamente y en ese caso los jueces nos dan la espalda, no hacen cumplir de acuerdo a ley”, dice indignado Luis Alvites.

Sin embargo, 18 años después de su despido el secretario general del Sindicato de Trabajadores de Oleotécnica S.A asegura que junto a sus compañeros; “no vamos a parar de luchar hasta que nos paguen, eso ya lo hemos decidido. Saldremos a reclamar a las calles nuestro derecho, a pesar de que la mayoría tenemos más de 60 años”.

“Pido a las autoridades que tomen en cuenta nuestro caso que se pronuncie el Presidente Ollanta Humal, la Defensoría del Pueblo, el Poder Judicial, en este país los trabajadores deberíamos tener los mismos derechos que los empresarios que tienen dinero e influencias” finalizó Alvites.