Mariátegui
18/07/13
Según fuentes confiables en las próximas horas estaría siendo arrestada la ex parlamentaria andina y ex dirigente del campesinado cocalero, Elsa Malpartida bajo similares cargos con los que se hizo con Nancy Obregón hace unos días; por presuntos vínculos con el narcotráfico y el terrorismo.
Como lo habían casi exigido algunos medios de comunicación, la próxima detenida sería Elsa Malpartida pero por cargos relacionados al caso Artemio.
Es decir, casi como en las épocas de la dictadura de Fujimori-Montesinos ahora se detiene por las acusaciones de testigos protegidos y sin contrastar esta información.
Teniendo sólo cómo pruebas las declaraciones de estos testigos y los titulares de los medios de comunicación que en reportajes profundizan esta especulación con más especulación en base a esta misma información.
Algo similar ocurrió con el operativo Eclipse 2010 en el Alto Huallaga -con apoyo de helicopteros norteamericanos- donde se realizó detenciones a decenas de campesinos, -acusados de narcoterrorismo- los cuales fueron finalmente liberados, varios de ellos años después, porque no se les encontró incriminaciones concretas.
Estamos entonces ante una peligrosa situación para dirigentes políticos, luchadores sociales o cualquier militante de izquierda que asuma la crítica o disidencia con el modelo neoliberal en todas sus expresiones.
Porque la detención de Obregón y si ocurriese con Malpartida sería un escarmiento a su pasado de dirigentes cocaleras que se atrevieron a participar en la política tradicional siendo congresistas.
Y eso además de dañarlas a ellas hoy, es un escarmiento para los que vienen atrás; como los dirigentes que luchan contra las transnacionales mineras, líderes obreros, estudiantiles y cualquier otro que quiera entrar a la lucha política electoral con un discurso distinto al impuesto por el neoliberalismo.
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